Como joven nuevo en el país y habiendo visto tantos "monumentos andantes", me aventuré a salir una noche a una disco cercana al lugar donde vivía.Tomando un par de rones conocí a una linda chica... como casi todas las de acá :)
Después de una conversación de oído a oído la invité a mi "casa de soltero", con la tranquilidad de que nadie interrumpiría. Había una persona que eventualmente podría hacerlo, pero él llegaba siempre los días sábados, mas esa noche era viernes.
Sentí un auto estacionarse mientras salía del baño después de una refrescante ducha, miré por el ventanal y ¡SORPRESA! ¡¡¡ERA ÉL!!!!
Mientras tanto la chica estaba ya en la ducha.
La visita tan inesperada entra y me encuentra en toalla. Entra a la habitación a dejar sus cosas mientras yo pensaba qué decirle.
Me metí al baño evitando que la chica saliera y explicándole la situación. Evidentemente ella se puso como loca.
Salí del baño para sacar de la habitación la ropa de la chica.
Preferí decir la verdad a mi familia:
"SABES, ESTOY CON UNA AMIGA. DÉJAME LLEVARLE LA ROPA AL BAÑO Y SALIMOS DE INMEDIATO".
A lo que él respondió: ¡AAAH... NO TE PREOCUPES, HIJO!
Pues la chica salió primero de la casa. Me despedí y dije que regresaría en un "rato"...
De ahí en adelante todo lector sabrá lo que pasó.
Ese "rato" se prolongó hasta las 7:30 AM
Moraleja: Mmm... VAYAN A UN MOTEL SIEMPRE Y CUANDO TENGAN LA DUDA... DE AQUELLA VISITA INESPERADA.
¡¡¡Saludos!!!
Enviado por ApuNahasapeemapetil, desde Santiago - República Dominicana
